Este ejercicio es realmente útil cuando estás cómodamente sentado con el periódico y una taza de té y quieres cerrar la puerta.
Etapa 1: Enseña a tu perro a tocar algún objeto con su hocico
Primero tienes que enseñar a tu perro a tocar con el hocico un objeto, como el extremo de una regla, o una nota post-it. Para ello, simplemente sujeta el objeto delante de él y, tan pronto como tu perro lo huela, prémialo con halagos y una golosina.
Repite el ejercicio hasta que el perro vaya enseguida a tocar el objeto.
Etapa 2: Enseña a tu perro a tocar el objeto colocado contra una puerta.
A continuación, coloca el objeto contra una puerta abierta a la altura del hocico de tu perro. Anímale a tocar el objeto con el hocico y prémiale cuando lo haga.
A veces tu perro empujara la puerta un poco más de la cuenta. Cuando eso suceda, felicítale calurosamente, ayudándole a empujar la puerta hasta cerrarla. Cuando tu perro haya entendido la idea, empezará a cerrar la puerta sin tu ayuda.
A continuación, introduce la orden “cierra la puerta” al tiempo que el perro hace el ejercicio.
Una vez que el perro responda bien a la orden, podrás prescindir del objeto y utilizar solo la orden, los premios y las recompensas.
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